El Municipio de Páramo del Sil con sus pedanías de Primout y Santa Cruz del Sil serán los espectadores privilegiados de la carrera por donde transcurrirá el recorrido.
Páramo del Sil es un municipio de la Comarca del Bierzo, en la provincia de León. En los pueblos que forman su término municipal, además de la actividad minera es importante la actividad agrícola y ganadera. Recientemente la industria de la pizarra está adquiriendo cierto auge. Páramo es un lugar idóneo para aquellos amantes del Turismo Rural y del senderitos pudiendo ascender al Catoute o visitar el Lago Miro. Las poblaciones que se encuentran dentro del término municipal son: Villamartín del Sil, Sorbeda del Sil, Arroyo del Sil, Primout, Salentinos, Santa Cruz del Sil y Anllares del Sil. Todos los pueblos homenajean al gran río berciano con la incorporación de la palabra Sil en el nombre de las localidades. Procedente de la Comarca de Laciana, donde tiene su nacimiento y camino del Bierzo Bajo, el río Sil cruza todo el término municipal.
El Ayuntamiento se encuentra en la localidad de Páramo del Sil (1.890 habitantes). Pueblo minero, en cuyo casco urbano abundan las casas blasonadas de piedra, dándole un aspecto de nobleza. Una de ellas conocida como «de la Indiana» es del siglo XVIII. En numerosas construcciones se conservan escudos de apellidos ilustres, como el de los Álvarez Osorio.
Esta villa recia y hermosa poblada por unos 1.800 habitantes, situada a unos 800 o 900 metros de altitud y registrada desde antiguo en los documentos como «Rivas del Sil», se encuentra firmemente asentada en una meseta al norte del Alto Bierzo (León), compartiendo con Laciana y Asturias paisajes y tradiciones.
Los ríos principales son el Cúa y el Sil con el que comparten nombre la mayoría de los pueblos que lo acompañan, sus corpulentos castaños dan sombra a sus gentes que, por ello, le han concedido el honor de formar parte del escudo que les representa, compartiendo espacio con el símbolo de la minería, pues estas tierras guardan en sus entrañas el preciado mineral energético, el carbón.
Como lugares de interés cabe destacar las ermitas, el paisaje, el conjunto de casonas de piedra, la arquitectura señorial (entre ella la Casa de la Indiana, del siglo XVIII, o la Casona de los Donis), y el templo parroquial (neoclásico, con cúpula sobre el crucero).
Recorriendo el valle del río Sil sin abandonar la C-631 (Ponferrada-Villablino), Santa Cruz del Sil, nos aparece como un pequeño pueblo situado a los lados de la carretera, dando una imagen engañosa de lo que en realidad es, ya que este es el barrio de «La Vega». Tomando el cruce que se nos ofrece hacia el pueblo y subiendo una considerable pendiente se nos abre un bonito pueblo que sorprende por sus paisajes, grandes castaños, encinares y numerosas fuentes y arroyos, que acompañan unas construcciones de pizarra y piedra dignas de ver, como pueblo que albergó en su día un monasterio importante en la zona, del que aun se pueden observar restos. En sus arroyos aún sobreviven algunos molinos hidráulicos, hasta no hace mucho tiempo, la fuerza de las aguas que bajan desde lo más alto de la sierra, para moler el grano de trigo y centeno que se cultivaba en los «eiros» que rodean el pueblo.
Santa Cruz es uno de los núcleos de población más importantes del municipio, y también de los más antiguos, hay escritos que ya designan al pueblo con este nombre en el año 922 y en ese pasado albergo sin duda los canteros que trabajaron la piedra para las construcciones templarias de la zona.Si vamos de paso, Santa Cruz tiene un par de bares que podemos utilizar de excusa para su visita, siempre tendrán algo fresco esperándonos en verano y si el día esta frío, un sabroso caldo caliente, que seguramente nos animara a ver algo más del pueblo.
Para llegar a Primout, de salida es mejor olvidarse del coche y calzarse unas botas cómodas. Aún pudiendo llegar con casi cualquier coche, en algunas épocas del año, el camino puede no encontrarse en buen estado para los vehículos y es un agradable, aunque largo paseo (entorno a los 12 km).
El pueblo llegó a estar abandonado, pero desde finales de la década de los 80 tiene habitantes ocasionales, que han reparado bastantes casas, sabiendo respetar las construcciones típicas. El pueblo ya recibía este nombre en algunos escritos del año 1091, apareciendo como «San Martín de Primout», que debía ser el patrón del pueblo y es más que probable que la fundación del pueblo fuera consecuencia de los pastores que la trashumancia acercaba todos los veranos a las brañas de la zona.
Flora y Fauna del Alto Sil
En sus grandes valles, protegida por imponentes montañas, podemos encontrar una flora y fauna muy variada. Sobre la avifauna, cabe destacar que el 14 % del municipio es Zona de Especial Protección para las Aves entre las que destacan águilas reales y culebreras, perdices rojas, urogallos, gavilanes o becadas.
En sus recónditos valles, se ocultan de las miradas corzos, jabalíes, zorros, rebecos, los temidos lobos o el esquivo oso pardo, parte de cuya pequeña población cantábrica sobrevive en esta zona bajo la atenta mirada de la fundación oso pardo La reina de los ríos es la trucha, en los bosques encontraremos robustos ejemplares de robles, castaños, encinas, capudres o acebos y en las altas montañas genciana y arándanos.
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